"A las mujeres las prefiero de multiples personalidad que doble cara" Hernán Velasco
Las personalidades múltiples también conocido como trastorno de personalidad disociativo siempre han sido algo fascinante para los humanos, la posibilidad de tener más de una sola personalidad invadiendo la psique ajena y descubrir si es en realidad un trastorno o simplemente el fruto de una mentira demasiado bien elaborada cuyo único objetivo es enredar y confundir a todo aquel que logra percibir los cambios aunque mínimos pero esenciales.
Cabe mencionar que algunos artículos o literatura sobre las personalidades múltiples siempre incluyen al menos una pequeña referencia a la mayor historia publicada sobre las personalidades múltiples; hablo de la historia de Flora Rheta donde narra la historia de Sybill, una joven norteamericana que llego a presentar 16 personalidades en total, todas y cada una de ellas, diferentes e independientes una de otra. El origen de la rama para el estudio de esta parte de la psicología se inició alrededor de los años 40, y se tomó como punto de partida los trastornos depresivos que padecía Sybill, sus constantes fallas, olvidos, mentiras y los cambios bruscos que llego a tener al estar con sus parientes. Los problemas a los que se enfrentaba como gastar dinero que ella no recordaba tener, usar ropas alteradas, o incluso llegar a viajar a lugares donde nunca pensó estar; estos trastornos la llevaron a presentarse a terapia y lo que lo un especialista identifico como trastorno depresivo; otra especialista la cual llego a estudiar por un periodo de tiempo indeterminado comenzó a identificar como un trastorno en la personalidad.
La teoría inicial sobre el desarrollo de estas personalidades fue alguna especie de abuso, el pertenecer a una familia con un fanatismo (principalmente religioso) y la combinación de una personalidad racista por parte de sus progenitores. Esta joven podría comportarse como una niña, un hombre, una mujer mayor, una francesa y demás personalidades. Cada personalidad tenía habilidades especiales y únicas no desarrolladas por ninguna de la otra, como ser buen matemático, dibujante, detallista, cocinera. Habilidades que ella no sabía tener o que incluso no podría ejercer al mostrar su personalidad primaria o la que normalmente muestran.
La complicación a la que se presentan para diagnosticar este trastorno radica en la multitud de signos que pueden presentar los pacientes al momento de dejar que una personalidad deje de manifestarse para dar paso a una segunda, así los cambios de ánimo radicales, forma en la que se expresan, vocabulario, pasar de diestros a zurdos, amnesia, cambio de estilo o hábitos, combinados con una vida desordenada, así como la cantidad aún desconocida y la razón por la cual la personalidad puede llegar a tener más de dos variantes junto con el momento en el cual esta se fragmenta. Aunque los primeros intentos por explicar la razón de la desintegración de la personalidad como un intenso estrés emocional o postraumático, debilidad emocional asociada a la niñez, incapacidad para mencionar y proyectar su propio YO; entre otros y la falta de atención a las pequeñas muestras que el paciente llega a dar sobre sus cambios o disociaciones en la personalidad pasan inadvertidas o se confunden con un deseo por llamar la atención, suelen ser confundidos con Mitómanos.
Es por eso que no solo hay que limitarse a observar detenidamente a las personas que nos rodean, hay que conocerlas, saber que sucede en sus mentes y sobre todo no dejar pasar por alto cualquier cambio que resulte sospechoso.
RockMaddie
No hay comentarios:
Publicar un comentario